Original de Paulo Roberto Gaetke, traducción al español por Enrique Ramón Galeano
¿Cuando nace el amor?
Cuando estamos carentes y alguien se aproxima
con manos extendidas
O cuando nos abrimos para la vida
Y despertamos pasiones
¿Será que existe una lógica en el amor?
Somos nosotros quienes decidimos la hora de amar,
O es el amor realmente un lazo,
Un paso hacia una trampa.
Si podemos vivir el amor,
porqué nos ausentamos,
porqué nos decepcionamos tanto
Y queremos huir de él
Por qué apostamos tanto en alguien,
y llegamos al punto de transferir nuestra felicidad
a otras manos?
Será miedo de la realidad, una fuga de nosotros mismos?
Será que es posible vivir un amor donde apenas la verdad,
y solamente a verdad sea la base de la relación?
Será que debemos evitar la máscara que colocamos en el amor?
Será que debemos ser tan realistas y secos para evitar el dolor?
El dolor, o amor, o calor, o deseo, o momento, la vida,
una explosión de todos los colores, de todos los sentidos.
Si tú ya no te acuerdas,
el amor provoca vértigos,
esparce fuego por todos los lados,
es un querer hasta sin querer,
es un transformación radical en nuestro metabolismo físico,
mental y espiritual,
cuando amamos llegamos más cerca de los ángeles...
Por eso, si tuviera que optar, entre el vacío de la razón,
por miedo de sufrir una decepción e amargar mi día,
aun así, prefiero el riesgo del amor, que embellece la vida,
da una motivación renovada, y transforma el mundo,
las personas y las actitudes, dejando todo más bonito,
leve y eterno.
El amor es eterno, aún cuando dura poco,
a emoción nunca se pierde, las personas van, parten,
pero queda siempre un perfume de nostalgias,
queda siempre una recordación deliciosa,
por eso, amar siempre vale la pena.
Sólo los tontos tienen miedo de amar...
Cuando estamos carentes y alguien se aproxima
con manos extendidas
O cuando nos abrimos para la vida
Y despertamos pasiones
¿Será que existe una lógica en el amor?
Somos nosotros quienes decidimos la hora de amar,
O es el amor realmente un lazo,
Un paso hacia una trampa.
Si podemos vivir el amor,
porqué nos ausentamos,
porqué nos decepcionamos tanto
Y queremos huir de él
Por qué apostamos tanto en alguien,
y llegamos al punto de transferir nuestra felicidad
a otras manos?
Será miedo de la realidad, una fuga de nosotros mismos?
Será que es posible vivir un amor donde apenas la verdad,
y solamente a verdad sea la base de la relación?
Será que debemos evitar la máscara que colocamos en el amor?
Será que debemos ser tan realistas y secos para evitar el dolor?
El dolor, o amor, o calor, o deseo, o momento, la vida,
una explosión de todos los colores, de todos los sentidos.
Si tú ya no te acuerdas,
el amor provoca vértigos,
esparce fuego por todos los lados,
es un querer hasta sin querer,
es un transformación radical en nuestro metabolismo físico,
mental y espiritual,
cuando amamos llegamos más cerca de los ángeles...
Por eso, si tuviera que optar, entre el vacío de la razón,
por miedo de sufrir una decepción e amargar mi día,
aun así, prefiero el riesgo del amor, que embellece la vida,
da una motivación renovada, y transforma el mundo,
las personas y las actitudes, dejando todo más bonito,
leve y eterno.
El amor es eterno, aún cuando dura poco,
a emoción nunca se pierde, las personas van, parten,
pero queda siempre un perfume de nostalgias,
queda siempre una recordación deliciosa,
por eso, amar siempre vale la pena.
Sólo los tontos tienen miedo de amar...
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